La Asociación Española de Denominaciones de Origen e Indicaciones Geográficas Protegidas -ORIGEN ESPAÑA- difundió el pasado mes de octubre, entre las administraciones nacionales, autonómicas y la Comisión Europea, un documento de posicionamiento (apoyado en legislación) demandando la exclusión del etiquetado o semáforo nutricional Nutri-Score en los productos agroalimentarios con esquema de calidad diferenciada DOP (Denominación de Origen Protegida) e IGP (Indicación Geográfica Protegida).
En dicho escrito mostrábamos nuestra intranquilidad por la implementación en España, por parte del gobierno, del sistema Nutri-Score. Pese a que en un inicio la utilización de éste será voluntaria, hay que tener en cuenta que todo producto comercializado bajo marca de distribución tendrá que llevarlo en caso de que dicha empresa decidiera implementarlo y que, además, su obligatoriedad será inminente.
En ORIGEN ESPAÑA somos conscientes de la prioridad en la política de la Comisión Europea de ofrecer a los consumidores sistemas de etiquetado en los envases que les ayuden a tomar decisiones sobre alimentos teniendo en cuenta su salud, información que nos parece de gran valor (estrategia Farm to Fork). Sin embargo, este tipo de etiquetados pueden ser muy perjudiciales para los productos agroalimentarios con etiquetado europeo de calidad diferenciada , es decir, para aquellos que cuentan con sellos de Denominación de Origen Protegida (DOP) o Indicación Geográfica Protegida (IGP) .
Nuestro posicionamiento es que dichos alimentos, con múltiples propiedades nutricionales, queden excluidos de este etiquetado, como alimentos tradicionales, con historia y valores diferenciales, tanto en su elaboración como uso de ingredientes. Además, son los únicos con una certificación de la CE que los vincula a un origen.
Los productos con DOP e IGP tienen con características diferenciales muy valorados por los consumidores y en ellos sería inviable la reformulación en caso de que quisieran optar a una escala más benévola en el semáforo nutricional, pues no podrían seguir siendo productos con DOP o IGP. Nuestra cultura gastronómica (certificada y controlada), nuestra cultura de la calidad diferenciada (Indicaciones Geográficas) no se puede ni debe reformular. De hecho, eso sería contrario a la esencia de las DOP e IGP.
Nuestra defensa respalda a los más de 195.155 operadores primarios vinculados con las denominaciones de origen en nuestro país y a las 3.455 industrias adscritas. Las DOP e IGP agroalimentarias españolas deberían estar excluidas de este tipo de etiquetados como forma de protegerlas, preservarlas y darles valor de cara a los consumidores.
Información ORIGEN ESPAÑA:
La Asociación Española de Denominaciones de Origen – ORIGEN ESPAÑA– se puso en marcha en 2008 gracias a la inquietud común de un grupo de productores de productos agroalimentarios por fomentar el reconocimiento del papel esencial de las Denominaciones de Origen Protegidas (DOP) e Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP) agroalimentarias españolas, más conocidas globalmente en España como “denominaciones de origen”.
ORIGEN ESPAÑA permite a sus socios compartir experiencias para establecer, desarrollar y proteger las denominaciones de origen agroalimentarias, además de facilitar el intercambio de información entre productores españoles de DOP e IGP. Asimismo, actúa como vector de comunicación e interlocutor destacado ante los organismos vinculados a las denominaciones de origen a nivel nacional, europeo e internacional.
ORIGEN ESPAÑA cuenta con una representatividad de casi el 78% del valor económico de las indicaciones geográficas agroalimentarias españolas, lo que supone unos 1.270 millones de €.